LOS NIÑOS Y LA TECNOLOGÍA: ¿DONDE PONEMOS EL LIMITE DE USO?

No voy a negar que el uso de la tecnología y dispositivos móviles por parte de mi hijo, me ha llevado a alguna diferencia de opinión con mi pareja. Supongo que no soy el primero ni el único, y que os ha pasado a much@s en alguna ocasión.

Tampoco voy a negar que mi opinión es algo radical en esta cuestión, considerando por ejemplo, que sustituiría, desde ya, la escritura manual por la digital en los primeros años de colegio como base de aprendizaje para la vida cotidiana, dejando la escritura a mano (junto a la musica, la robótica o la pintura por ejemplo) para ese espacio de creatividad y análisis que actualmente no tenemos en las aulas de nuestros niños, algo deseable a la vez que necesario

En cualquier caso, la respuesta a "¿donde ponemos el limite al uso de dispositivos móviles a nuestros hijos pequeños?" no se convierte en una decisión difícil hasta que no lo vives en tu propia casa. Me resultaba fácil opinar antes, y complicado tomar la decisión o encontrar la respuesta adecuada ahora, con mi hijo de casi 3 años.

Tras leer mucho y observar aun más, comienzo a pensar que la respuesta es mas sencilla que lo que yo tiendo a pensar o que muchos quieren justificar. No es una salida fácil por mi parte, es mas un convencimiento empírico, situar el uso de estos dispositivos en el mismo plano que lo hacían nuestros padres con nosotros, aunque con formatos diferentes... y me intento explicar.

No es lo mismo que el niño esté usando la tablet para ver contenidos online de ocio como dibujos, pelis o personas enseñando a montar juguetes (aunque no lo creáis, es increíble como se enganchan los niños a estos últimos), a que la esté usando para juegos educativos o para aplicaciones de pintura, escritura, puzzles, matemáticas o memorización.

Nuestros padres limitaban nuestro tiempo de televisión o de los juegos del Spectrum +2 128k, pero raramente te quitaban un cuaderno, un lienzo o un puzzle si querías pasarte la tarde intentándolo. Es algo de sentido común combinar los tiempos de ocio (algo de lo que no solemos cansarnos, incluso cuando somos mayores) con el aprendizaje (preferiblemente divertido en mi opinión) en edades tempranas.

Lo que creo que no podemos hacer es demonizar los dispositivos móviles, precisamente porque parte del tiempo de aprendizaje puede realizarse con ellos. Es un mundo y un lenguaje natural para los niños, mucho mas que para nosotros. Yo personalmente aun soy mas radical, creo que es bueno que gran parte de ese aprendizaje se haga con tecnología, ya que es el mundo al que se va a enfrentar día a día, y el manejo de la misma será beneficioso para su futuro en todos los casos, da igual que se decante por letras o ciencias, todos necesitarán saber algo de matemáticas y tecnología.

Pero esta es solo mi respuesta, seguro que tú tienes otra, y probablemente mejor, ¿me la cuentas? ;)